04 diciembre 2010

Hasta cuando; el colmo

Siguiendo mi recién descubierta costumbre de entrar a esta pocilga cada cierta cantidad de meses o años, se me ocurrió la fantástica idea de volver a leer la sarta de estupideces que he acumulado "públicamente" en este blog. Y sí, hoy soy un soez de porquería; ¡con un demonio, Jack!.

¿Con qué me encuentro?...

¡Con una redacción corrosivamente horrible! ¡Y sí! ¡Es absourdamente irrelevante!... pero me permite descargar energía mediante palabras y así no tener que golpear frenéticamente a nadie entre la nariz y los dientes.

Y no, no estoy enojado, solo tengo ganas de martillar un rato el teclado.

Leo párrafos que alguna vez elogié con frases del tipo "¡Ta' maire' que escribo lindo oiga!" y ahora solamente digo "Hijo, estoy desepcionado de tí". Tomaré este suceso tan relevante e interesantísimo para el desarrollo cognitivo humano a nivel mundial y le buscaré una solución o al menos una explicación lógica, porque claro, soy un hombre y como tal debo tener un pensamiento del tipo Problema -> Solución.

Digamos que he entrenado tanto la escritura a punta de e-mails, cartas y propuestas (puta pega) que me he convertido en un monstruo come galletas criticón. No sé que mierda tiene que ver el bendito monstruo come galletas; ocurrencias de mi tecleo sin revisión.

Es interesante eso, es interesante la manera de funcionar de esta basofia de blog. Llega un día del colegio, de la universidad, del trabajo, del asilo, del cementerio y ponte a escribir lo que se te venga a la cabeza (de arriba) y nisiquiera te des la molestia de revisar; solo click en "Publicar Entrada". Es entretenido, después lo re lees y te matas de la risa solo, pensando en qué royo se pasará el ocioso que por idioteces del destino encuentre tu blog.

Si, estoy aburrido y debería estar durmiendo... de hecho estoy tan aburrido que escribo pensando en que alguien lee y pensando en que esa persona intenta comunicarse; sí, te estoy respondiendo.

Creo que es momento en que dejes de inmiscuirte aquí, por dos razones. La primera consiste básicamente en el hecho de que no te aportará nada más que a seguir metiendo basura a tu cerebro; recordemos que la información almacenada no se eliminará jamás sin una buena lobotomía como en tiempos mejores. La segunda razón es porque sonaba muy estulto dar una sola, así que anuncié dos, pero no hay dos, solo una; ¿se entiende cierto?... o quiere que le explique con manzanitas.

En fin, el tema central es que si pudiera, editaría todos y cada uno de los post con cara de desepción y autoinflingiéndome castigos por escribir tan burdamente. Me dejaría sin Super Nintendo por una semana, o sin tele, sin salir a jugar al pasaje e incluso sin idas a la playa... santa mierda, denuevo me distraje y olvidé han pasado como quince años y que encima más nunca me han castigado.

He aquí una foto que refleja mi cara al leerme a mí mismo:

Hasta pronto, soperútanos.

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